Harlem Globetrotters 2011.

El día 19 de mayo de 2011 pudimos disfrutar en Córdoba de un gran espectáculo. Nos visitaban en el Polideportivo Vistalegre, los Harlem Globetrotters. Por lo visto muchas personas no se enteraron de dicho acontecimiento, y pudieron descubrirlo gracias a la infinidad de fotos que pude hacer y quise compartir en las redes sociales, por lo tanto un 0 para la persona que se encarga de hacer la publicidad de estos espectáculos, ya sea del Ayuntamiento o el responsable de la sección de marketing de los Harlem.

¿Quiénes son los Harlem Globetrotters? Puede que seas la única persona en el mundo que no los conozca, pero voy a ponerte en situación. Los Harlem Globetrotters tienen más de ochenta años de historia. Nacieron con el objetivo de entretener al público, ya que las bandas de músicos eran muy caras para el presupuesto de los salones de baile estadounidenses. Un judío llamado Abe Saperstein, tuvo la original idea de montar dos canastas y organizar una partido entre sus “Five Savoy”, gigantes de color, y cinco espectadores, apostando cien dólares a que ganaba su equipo.

Fue a partir de ese momento cuando empezó la fama de este equipo, que pronto tomó el nombre de Harlem, el nombre del barrio de Nueva York del que provenían sus jugadores, para sí enfatizar su origen africano y también como protesta, ya que en la Norteamérica de esos años no estaba permitida la participación de los negros en las ligas de baloncesto ni de béisbol.

Desde entonces este famoso equipo de baloncesto, se ha paseado por una infinidad de países de todo el mundo, tratando de sacar una sonrisa a niños y mayores, con sus jugadas inverosímiles, velocidad, habilidades y sobre todo con un show de ensueño.

Hoy su labor va más allá, este equipo tiene el honor de ser Embajador de la Buena Voluntad y de la Fraternidad entre los pueblos, gracias al reconocimiento que la UNESCO les atribuyó hace más de 50 años. A partir de entonces han sido numerosas sus visitas a Jefes de Estado, primeros ministros, pontífices y celebridades del mundo de la política, de la cultura y las artes. Todos ellos han tenido en sus manos el balón tricolor típico del equipo.

Retomando el tema, puedo asegurar que son los dineros mejor invertidos de nuestra vida (ya que fui con Pili, mi novia ); no paramos de reírnos, de cantar, aplaudir y de alucinar con sus jugadas. “¡Pobre equipo rival¡”, pensábamos. La paliza que les dieron fue brutal, ¿pero qué se puede hacer cuando tienes un equipo en frente que trata al balón como una extensión más de su cuerpo?. Aún así, plantaban cara, sobre todo un jugador, que curiosamente era el objetivo de las burlas de los jugadores de los Harlem, un jugador de apenas “metro y poco” que lo dejaron literalmente en pañales.

Creo que nunca olvidare los 3 minutos que se marcaron los Harlem jugando dos contra 5; se tiraban al suelo, como si de un baile se trataran, se movían con una velocidad endiablada, y metían todo, sencillamente impresionante.

Además de todo lo visto en el espectáculo, justo después del final del partido se dedicaron durante 15 minutos (sin descansar, ni ducharse, ni beber) a firmar y a hacerse fotos con todo el que quisiera, sin perder la sonrisa, como si el esfuerzo no hubiera pasado por ellos. Es por eso que para mí quedaran como el mejor equipo del mundo, gracias por hacernos disfrutar y reir.

  

I love Harlem Globetrotters.